Reseña histórica

Por los años cincuenta el país entro en una franca reorganización de  su actividad transportadora expidiendo normas precisas que  reglamentaban el accionar no solo de las grandes empresas de  entonces a nivel nacional, sino de las departamentales y las pequeñas  que habrían de formarse en los municipios. Esto implicaba que en  Viterbo se empezara a pensar en qué forma se le daba marco legal y  jurídico a su hasta entonces caótica actividad en este campo.

Es aquí donde empieza a descollar la figura de Pedro María Zapata  Gallego, personaje metido en estas lides casi desde el momento  mismo de la llegada a la ciudad , desde la vieja Antioquia, pero que a diferencia de otros igualmente involucrados en ellas, no solo se movía dentro este ambiente como  simple trabajador de tabla, conductor a voceador, sino que con un agudo olfato futurista trabajaba  por la organización del transporte local, circunstancia absolutamente indispensable para su crecimiento.

Don Pedro era especialmente acucioso en este campo.  Se movía aquí y allá estableciendo  contacto con empresas regionales para buscar asesoramiento en desarrollo de su anhelado  sueño de crear su propia empresa de transporte.  Para tal fin se informaba de cada disposición  oficial y cada norma sobre funcionamiento de esta actividad llegando  a ser en consecuencia, el  ciudadano local más conocedor de las  mismas.  Merced a su entusiasmo y dedicación nació por entonces la Empresa Transportes Pedro Zapata.  Por primera vez se asociaba el transporte de la ciudad y empezaba a caminar jurídica y legalmente en el año de mil novecientos cincuenta y cuatro (1954) según la Resolución de  funcionamiento Nro. 181, su respectiva Personería Jurídica y Certificado de la Cámara de  Comercio Nro. 17444.

Agrupando las modalidades de buses, taxis y camperos avanzó la nueva Empresa en medio de  un proceloso mar de dificultades, propias de una organización que apenas arrancaba.  Por  supuesto que don Pedro sorteaba cada obstáculo con sorprendente habilidad, fruto de los  conocimientos que tenía sobre el manejo de esta actividad, y fue tanto el vigor que le imprimió  a  su desarrollo que ya en la década de los años setentas su fortaleza dio campo para que se creara  una empresa similar, Transportadores de Viterbo, sin que ello, viniera en detrimento de su propia  organización y por el contrario se hiciera mas grande e importante el transporte de la ciudad.

En el año de mil novecientos setenta y tres (1973) se reorganizó la Empresa, recibió nuevo  impulso con la vinculación de nuevos socios y tomó el nombre de Transportes Zapata que  conserva hasta hoy.

En el cumplimiento de sus propósitos don Pedro era cada vez más exigente y no cejaba en su  empeño de tener para Viterbo un transporte que se ajustara al mismo desarrollo y progreso de la  ciudad. Su sueño era un servicio moderno, con rutas extendidas a todo el territorio nacional y  mejores  frecuencias, como si desde entonces avizorará que la ciudad habría de necesitarlo,  tal  era su formidable visión y su fe en los destinos de la misma.

Por fin en el año de mil novecientos noventa y tres (1993) se empezó a cumplir el sueño de nuestro personaje.  Atrás quedaron los obsoletos taxis e incómodos buses y llegaron unos  modernos y comodísimos microbuses o busetas que en cierta forma revolucionaron esta actividad  con salidas cada quince minutos y el despegue definitivo de nuestro desarrollo y progreso.

Cumplida esta etapa de modernización del servicio con evidente éxito y aceptación general y  fieles al propósito de mantener a la Empresa en permanente evolución, en el año dos mil uno  (2001) se inicio el proceso de ampliación de la capacidad de aforo de los vehículos con el cambio  de los microbuses de catorce pasajeros a busetas modernas y cómodas hasta de veinticuatro  pasajeros brindándoles más confort, mas seguridad y rapidez en el servicio.

Este proceso continuará hasta lograr la renovación total del parque automotor y aspiramos que al  cumplirse en el año dos mil once el cincuentenario de la Empresa paralelo a los CIEN AÑOS  de  fundación de la ciudad hayamos cumplido este propósito como nuestro mayor anhelo.